Ara dedicada a Júpiter.

Lugar de celebración:

Descripción:

El Museo de Zamora. El pequeño espacio del museo al que coloquialmente nos referimos como “rincón divino”, dedicado a la religiosidad en época romana, exhibe en su lado derecho un monumento marmóreo en el que se invoca a Júpiter, padre de los dioses. 

Es la pieza más antigua -mediados del siglo I d. C- del conjunto, la más “clásica” y honra a la deidad más "clásica", como se indicaba en la anterior entrega. Aunque ha perdido su base, se puede apreciar su forma y los elementos habituales de un ara: su remate en frontón, sobre cuya cima se encuentra el "focus", ese círculo que albergaba el fuego sagrado, y los "pulvini" o rollos laterales, en los que apenas se atisban huellas de su decoración. En la superficie frontal de la cabecera se dibuja un elemento inciso al que se supone un carácter simbólico. El altar fue dedicado al gran Júpiter, el mejor (Iovi Optimo Maximo), por sus méritos, por Lucio Valerio Marcelo. 

Su hallazgo casual en la localidad alistana de San Juan del Rebollar añade un testimonio nuevo y un argumento más a la romanización de esta recóndita comarca zamorana tan pródiga en documentos epigráficos.