Museo de León
18 de febrero de 2009
26 de abril de 2009
Educación, Investigación, León, Cultura, Actividades culturales, Museos, Centros, aulas y yacimientos arqueológicos, Colecciones, Conservación, Exposición
Museo de León
Museo de León
Organiza: Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales (
SECC
) del Ministerio de Cultura de España
Sede en el Museo de León. Plaza de Santo Domingo, 8. 24002 León
Fechas previstas: 18 de febrero 2009 - 26 de abril 2009
Entre 1776 y 1814 revoluciones y guerras transformaron radicalmente el mundo occidental. Europa y América sufrieron un cataclismo que hirió de muerte al viejo régimen aristocrático y a las monarquías absolutistas y sentó las bases de una nueva sociedad. Las fronteras entre los estados cambiaron de forma radical, surgieron nuevas naciones y aparecieron nuevos valores que permitieron a los seres humanos convertirse en ciudadanos libres, poseedores de derechos que se consideraron naturales, inseparables de su condición. Los Estados se dotaron de Constituciones que garantizaron esos derechos y establecieron sistemas de gobierno representativos que les permitieron participar en la actividad política. Aunque la derrota de Napoleón pareció el comienzo de una vuelta al viejo Orden en Europa, la Restauración no fue más que un breve paréntesis, que seis años después una nueva revolución española volvería a poner en cuestión.
En España el proceso comenzó en 1808 con la combinación de una grave crisis política y la decisión del emperador de los franceses de aprovecharse de ella para cambiar la dinastía gobernante y colocar al mayor imperio colonial de la época bajo su control. La invasión napoleónica provocó una reacción popular única en Europa y el comienzo de una guerra que se combinó con un proceso de reformas políticas, expresión del generalizado deseo de cambio que existía en la sociedad española. Guerra nacional contra un invasor extranjero -guerra convencional y guerra de guerrillas-, guerra civil, revolución, reacción de los partidarios de Antiguo Régimen, todo eso encontramos en seis años complejos, con vertientes contradictorias que apasionan y enfrentan a los historiadores. Lo que es indudable es que se trata de un periodo decisivo, que marca el comienzo de nuestra historia contemporánea.
León jugó un papel importante en la Guerra de la Independencia. Fue una de las primeras ciudades españolas que, el 24 de abril de 1808, expresó su apoyo a Fernando VII cuando su recién alcanzado trono comenzaba a verse amenazado, fue también la primera de las provincias que integran la actual Comunidad Autónoma que se levantó contra los franceses y erigió una Junta. La Junta leonesa se constituyó en el núcleo fundamental de la Junta de León y Castilla, o de Castilla y León, de ambas formas se la denomina, que elegiría a los representantes de ambas regiones en la Junta Central. Que Galicia fuese liberada de forma definitiva en la primavera de 1809 y que el control francés sobre Asturias fuese sólo intermitente, convirtió a León en zona fronteriza, permitió que el Bierzo estuviese mayoritariamente en manos patriotas, así como la zona montañosa del norte, y que fuese teatro de operaciones de importancia. Sólo cabe recordar que el propio Napoleón estuvo en Astorga en enero de 1809 o los sitios que sufriría esa ciudad.
La exposición Ciudades en armas, León en la Guerra de la Independencia, refleja fielmente este estado de cosas y recuerda los procesos históricos que acontecieron en estos años decisivos, tanto a nivel nacional como local.